Llegamos un grupo de 5 amigas de diferente procedencia, Bilbao, Córdoba, Madrid y aunque algunas ya conocíamos el entorno, nos dejamos sorprender por el pueblito. Los dueños tienen una tienda de recuerdos y gastronomía de la zona justo debajo de la casa y estuvieron pendientes en todo momento de nuestras necesidades. La recepción de las llaves fue a una hora tardía, 9.30pm dado nuestra distancia y a pesar de ello, Hector, el propietario nos espero sin problema. Nos dieron recomendaciones gastronómicas, de reserva de visitas guiadas y sobre todo rutas para andar y disfrutar del magnífico paraje que rodea Albarracín. Una persona súper cercana y dispuesta a responder a todas nuestras preguntas.
La casa es tal cual las fotos, impecable, con todo lo necesario. Las camas muy cómodas para un sueño reparador, y nos sentimos como en casa, la pena no poder pasar mas tiempo allí.
Recomiendo a grupos de 6 personas que elijan esta casa, perfectamente situada en la Plaza Mayor del pueblo y u paso de numerosos restaurantes y con todo lo necesario cerca.
La hora de salida, al no tender inquilinos ese día de entrada, nos dejaron dejar las maletas hasta las 14:00 que ya iniciamos el retorno a nuestros destinos. Inmejorable!!